Las rocas que forman mi colección son principalmente Peridotitas, Peridotitas con diferentes grados de serpentinización, Serpentinitas y algunas Magnetitas que a lo largo de los años he ido recogiendo en mis paseos por las playas y en las inmediaciones del cauce de Rio Real, en Marbella.
Todas ellas fueron encontradas en la superficie y conservan el estado original de canto rodado en que fueron encontradas, habiéndoles realizado únicamente un leve pulido para sacar el brillo que permite su estructura microcristalina. Sólo en algunos casos tienen un leve tallado a mano para marcar la forma que recordaban.
El nombre de la colección, LoveStones, procede de la forma de corazón que tienen la mayor parte de las rocas que la componen y aunque no podría decir si ese es su aspecto porque de modo inconsciente las empecé a buscar así, lo cierto es que la naturaleza acumuló un sorprendente número de ellas en esta pequeña esquina del mundo por la que paseo y que con el tiempo estas piedras me han hecho estar seguro de que lo único que debería movernos es el amor por las cosas que hacemos y por nosotros mismos, por quienes nos rodean y por esta maravillosa tierra en que vivimos.
Además de Serpentinitas de Marbella y en la medida en que están en el origen de mi larga relación con las piedras, forman parte de mi colección algunas rocas de otros tipos que considero notablemente curiosas, fundamentalmente por su forma o por los dibujos que presentan y fueron recogidas hace ya muchos años en las arenas de Tarifa y Lanzarote.
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